Receta de Brócoli con Pollo en Microondas

Receta de Brócoli con Pollo en Microondas

Para cocinar el brócoli podemos elegir mil maneras: cocerlo en olla rápida, en el  microondas, en la vaporera de la Thermomix… Dependiendo del método que se elija los tiempos de cocción variarán. En esta ocasión vamos a prepararlo con el microondas, un electrodoméstico que hemos usado en otras recetas y que nos ayuda a cocinar de una forma rápida, fácil y sin casi utilizar  utensilios extra, tan solo una sartén y un bol. Esta receta de brócoli con pollo está extraída del recetario asiático, el toque de la salsa de soja y el jengibre nos recordará a los sabores orientales.

 

Ingredientes del Brócoli con Pollo

Para 4 raciones

  • 2 pechugas de pollo fileteadas
  • 300 gr de brócoli
  • 2 dientes de ajo
  • 3 cucharadas soperas salsa de soja
  • 6 gr de Jengibre fresco
  • 30 gr de semillas tostadas de ajonjolí
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal y pimienta

Preparación de Brócoli con Pollo en el microondas

En primer lugar lavamos y cortamos los ramilletes del brócoli y el tronco en láminas muy finas, lo ponemos todo en un bol con 1 cucharada de agua y lo tapamos con la tapa, con un plato o con un papel film, durante 4 minutos. Una vez transcurrido este tiempo le añadimos unas gotas de limón y lo dejamos reposar.

Salpimentamos la carne y la doramos en una sartén junto con los ajos y el jengibre cortados ambos en finas láminas. Una vez se dore la carne, añadimos el brócoli reservado en el bol, la salsa de soja y el agua que haya quedado de la cocción en el microondas. Mezclamos todos los ingredientes bien y volvemos a cocinar en la sartén hasta que se reduzca la salsa.

Ya sólo nos queda emplatar y ¡a disfrutar!

Consejos de Mr Broko

  • Podemos prescindir de la salLa salsa de soja y el jengibre tienen sabor suficiente para que al plato no le haga falta sal. Sin embargo, siempre puedes añadirle un poco o usar una salsa de soja sin sal para poder aderezar a tu gusto.
  • Puedes personalizar la receta añadiendo por ejemplo algo de cebolla, bechamel o queso.
  • Si te gustan los sabores orientales y te atreves, puedes añadir también salsa de ostras. Dos cucharadas de este ingrediente y obtendrás un plato típico de Asia.